Desde que la situación generada por el Covid-19 tomó trascendecia en nuestro país, nos dedicamos a contribuir con todo lo que estuviera a nuestro alcance para aplanar la curva de contagio de coronavirus.
El primer paso fue puertas adentro. En Redjar empezamos a trabajar todos los días desde casa para evitar contagiarnos o ser vectores del virus.
Este aspecto fue fácilmente abordado gracias a la forma de trabajo que llevamos adelante desde siempre. La confianza y el trabajo remoto nos permitió seguir cumpliendo con los proyectos que llevamos adelante y de los que somos parte. (Ver más en Coronavirus y trabajo remoto)
El segundo paso fue encontrar formas de colaborar dentro de las posibilidades que dicta la cuarentena. Desde ayudar a nuestros vecinos hasta organizarnos dentro del espacio “Redjar solidario” para contribuir a lo que parece ser la mejor solución a esta pandemia.